El intendente de Gaiman, Darío James, dijo ayer a Radio Sónica que si no se toman medidas que garanticen la seguridad de la gente honrada, “acá va a haber sangre en serio, porque los chacareros están armados”, al tiempo que criticó severamente a la Justicia y a las leyes que favorecen a la delincuencia.
El jefe comunal afirmó que la inseguridad en la zona de chacras “es un problema gravísimo, pero hay que hacerse cargo. La policía está trabajando y me consta. Pero acá el problema es la Justicia. Los delincuentes tienen todo a su beneficio. Tienen todo el día para hacer logística y luego pegan el golpe. Y si les sale mal no es un problema para ellos, porque en horas están afuera y vuelven a programar un nuevo ataque”.
“No podemos estar en todos lados, no hay recursos y encima tienen el beneficio de que la justicia los ampara. Por eso cuando digo que tenemos que hacernos cargo, tenemos que hacernos cargo todos: la Justicia, los legisladores trabajando por la gente de bien, la que trabaja y paga sus impuestos, los gobernantes y los mismos ciudadanos”, enfatizó.
En la misma línea agregó que “no puede ser que tengan más beneficios los delincuentes que las personas de bien. Esto es el país del revés y eso me enoja terriblemente. Hicimos reuniones, todo bárbaro, pero los resultados no aparecen. Y si no depende de nosotros, que los legisladores nacionales se muevan. Alguien tiene que moverse en este país para cambiar estas leyes que benefician al delincuente”.
A modo de ejemplo de la ausencia de medidas que penalicen el accionar de los delincuentes, citó un suceso recientemente en estos términos: “hace tres semanas atrás, la policía con un muy buen trabajo en la localidad atrapó dos delincuentes. Para eso hubo una persecución en la que sufrió averías la única camioneta cero kilómetro que nos dio la provincia. Y estos delincuentes no duraron más de dos horas adentro. Y hoy tenemos una camioneta averiada, que va a costar arreglarla y todo lo que llevó a atrapar a los delincuentes quedó en la nada”.
Esto no da para más y yo lo que temo sinceramente, es que acá va a correr sangre. Los chacareros están armados y a mí me dicen en confianza: si entra alguien lo bajo. Y a eso no tenemos que llegar”.
Luego de la catarsis, James ratificó su intención de ir por la reelección. “Si el pueblo de Gaiman así lo considera”, acotando en ese sentido que “nosotros tenemos mucho para dar todavía. Recién estamos en el principio de la tercera etapa que es la de crecimiento y tenemos todo para hacer. Sabemos cómo hacerlo y tenemos la fuerza y las convicciones para hacerlo”.